Ref.: RODE-00021
Heinkel 111A
Caracteristicas
De Roden a escala 1/72 para montar y pintar
Historia
El Heinkel 111 entró en la historia de la aviación de la Segunda Guerra Mundial como uno de los mejores bombarderos de alcance medio, aunque su servicio de combate inicial con los primeros aviones construidos fue muy corto debido a problemas de fuselaje y de motor.
Justo después de que Adolf Hitler se convirtiera en Canciller del Tercer Reich, comenzó el proceso de romper el Tratado de Versalles.
Pero Alemania no estaba en condiciones de desafiar a Gran Bretaña y Francia y el concepto de aviación de bombarderos consistía en construir aviones de transporte que pudieran convertirse en bombarderos cuando la guerra fuera inevitable.
El 24 de febrero de 1935 tuvo lugar el primer vuelo de los nuevos aviones.
El rendimiento del vuelo fue satisfactorio y el avión regresó a la fábrica para ser mejorado.
El Reichsluftahrtministerium a finales de 1935 ordenó un lote de preproducción de 10 aviones, que recibieron el nombre oficial de He-111A, a diferencia del prototipo, el He-111A era 520 kg más pesado, y la velocidad de crucero se redujo a 168 mph (270 km/h).
El nuevo avión era, sin duda, inadecuado para la Luftwaffe.
Esta decisión fue inesperada para Heinkel, que ya había iniciado las pruebas de vuelo del muy potente prototipo He-111V5.
Pero al mismo tiempo, mientras todo esto ocurría, la comisión de compras militares chinas estaba en Alemania.
El conflicto fronterizo chino-japonés había generado un mandato del gobierno de Chiang Kai-shek para obtener bombarderos.
Pronto seis He-111A con miras de bombardeo borradas y equipo de radio fueron desmontados y enviados a China por mar.
A finales de 1936 los seis nuevos bombarderos se unieron a las fuerzas aéreas chinas.
Fueron utilizados por primera vez operacionalmente para atacar al ejército japonés cerca de Shanghai, siendo acompañados por aviones de escolta Martin 139 y Boeing 281.
Cinco de los seis He-111A que participaron en esta misión (con tripulaciones chinas inexpertas) se olvidaron de levantar la posición del artillero ventral y los Heinkel cayeron detrás de los Martin y los Boeing. Los cazas japoneses derribaron tres de ellos, los otros volvieron a la base.
Los tres He-111A sobrevivientes estuvieron en servicio hasta el otoño de 1937.